A los estadounidenses les encantan los coches clásicos. Restaurar y conservar un coche de la década de los 50, 60 0 70 es un reto para muchos americanos. Si viajas por las carreteras de ese país podrás descubrir algunas granjas y propiedades que atesoran algunos de estos modelos entre polvo, utensilios del campo y cachivaches de todo tipo.
Los fines de semana familias al completo acuden a uno de estos lugares solo para pasar el día paseando entre Dodges, Cadillacs, Pontiacs o Chevrolets. Su sueño, hacerse con uno; la realidad, pasar el domingo admirándolos.